Había una vez un pescadero que quería visitar a su primo pescador.
Le contó que iba a una playa que había muchos tiburones.
Fueron a esa playa con el coche del pescadero.
Llegaron a la playa y había un animal muy gigante marino que hizo:
-¡plaf!
Y dio un salto muy gigante y luego lo hizo más fuerte todavía:
-¡¡¡plaf!!!
Era una ballena. Y luego vino un tiburón y pescaron a los dos animales.
Se comieron al tiburón y a la ballena y también iban a pescar pirañas.
FIN