Érase una vez un hombre que tenía unas llaves y una mascota que era un gato.
Un día el gato jugando tiró las llaves a un agujero.
El hombre intentó cogerlas del agujero pero no pudo, entonces se le ocurrió un idea, compró una caña de pescar y...
¡¡Bien!! así las pudo coger y dijo ¡¡¡Que buena idea!!!
FIN